El tratamiento se personaliza según las necesidades individuales y la sensibilidad de la piel, garantizando una experiencia cómoda y eficiente.
Los resultados se notan desde las primeras sesiones, con una disminución progresiva del vello y una piel más lisa y rejuvenecida.
Cada sesión varía de 15 a 45 minutos, adaptándose al área de tratamiento.